La tradición en Lumbrales, Salamanca, es que cada 31 de diciembre, se cena y luego se celebra La Misa del Gallo. Ahora, todo el mundo sale después a celebrar el fin de año; pero claro, en los años ochenta salir por la noche y tener la libertad de trasnochar era todo un acontecimiento en la vida de cualquier chico o chica de los que vivíamos en el pueblo. Además, con el aliciente de que teníamos a los colegas recién llegados de Madrid, País Vasco, etc…
Después de mil bailes por las discotecas y bares del pueblo, rodeado de amigos y chicas súper guapas… a eso de las seis o siete de la mañana venía la peor parte: «Ir a ordeñar las ovejas». ¡Era condición innegociable para que nos dejasen salir toda la noche de fiesta!
El Queseru con Claudia, La Pastora
Pues ¡a ordeñar! Claro, que yo no quería perder el contacto con mis amigos, por lo que convencía a mi madre, Claudia la Pastora, para que en lo que yo estaba ordeñando con mi padre, Toño Pájaro, les ofreciera un suculento desayuno de huevos fritos y chorizo para que me esperasen y, así, poder seguir después de fiesta por Lumbrales. ¡Había que recibir como Dios manda al Nuevo Año!
El estado físico y mental del momento era de lo más peculiar, ya que la emoción doble de una noche de fiesta y jolgorio y la presencia de los colegas en la cocina desayunando hacía que la adrenalina te jugara malas pasadas… Y así fue: el tortazo que me dio mi padre fue tal que me caí del tajo y casi tiro la leche que ya tenía en la colodra.
Yo no sabía por dónde me venía, solo sé que pregunté un momento antes: «¿Por qué esta oveja no tiene tetas?…». Luego me di cuenta de que había agarrado al borrego para ordeñar.
¡Os podéis imaginar, los que entendéis de estos oficios, la reacción de Toño…!
El Queseru en sus tiempos mozos
Creo sinceramente que de momentos como ese me viene mi pasión por Mi Empresa y uno de mis sueños: revalorizar en cada momento una figura tan importante en la historia de nuestra cultura y nuestra economía como es la figura del Pastor.
Además de Cocinar con Queso, fusionar culturas y formas de entender el mundo y, por supuesto, la Gastronomía, uno de los objetivos de esta segunda edición del «Congreso Internacional de Cocina con Queso…y Humor» es hacer realidad uno de mis sueños: entregaremos un Premio Especial a los Pastores:
Uno, al Pastor Tradicional de siempre, que con su esfuerzo, rebaño y trabajo diario consigue llevar a su familia hacia adelante.
Dos, a los Nuevos Pastores, ya que hoy en día el mundo ha cambiado y también la forma de explotar y cuidar los rebaños.
Estoy seguro de que el 8 de octubre será un gran día y que, a partir de las 20.30 h, estaremos en Peñaranda de Bracamonte codo con codo con nuestros amigos del Centro Internacional De Tecnologías Avanzadas, con Helio Flores, compañero inseparable, y con el resto de colaboradores que podéis ver aquí.
Sin duda alguna, sin el esfuerzo no se consigue nada, pero todo lo que hagamos debe de llevar un poco de amor por nuestros orígenes y una buena dosis de pasión para trasmitirlo al mundo o a quien nos quiera escuchar.
El siglo XXI nos ha traído muchos cambios. Uno de ellos es esta nueva forma de comunicación, esta nueva forma de llegar a cada una de las personas que nos rodean y que pueden tener interés por lo que hacemos. Esto es lo que nos permite también a las empresas de diferentes sectores y con distintos intereses unirnos para realizar acciones que nos pueden beneficiar a todos con un interés común: poner en valor nuestro trabajo, el que no se puede vender porque nadie lo compra y a nadie le interesa.
Y es de ahí de donde surge este Congreso que, sin duda alguna, os llenará de alegría y emoción «vuestras alforjas» con la fuerza, la ilusión y el trabajo de las empresas que os haremos disfrutar de esta velada.
Sigue todas las noticias sobre el «II Congreso Internacional Cocina con Queso…y Humor» en:
#CocinaconquesoyHumor
#QuesoyHumor
Si quieres escuchar el podcast puedes hacerlo aquí:
Deja un comentario